Sin tetas no hay paraíso
Catalina es una joven de diecisiete años, buena estudiante y buena hija, que convive con su madre Fina y su hermano Jesús. Su padre abandonó a su madre cuando ella era pequeña, y desde entonces Jesús ejerció de padre con Catalina, dejó de estudiar y se puso a trabajar para darle un futuro y ayudar a su madre. A pesar de ser dulce y risueña, Catalina no ha encontrado la felicidad plena, pues tiene un complejo: su falta de pecho…